COMUNICACIÓN CORPORATIVA
Cualquier empresa necesita contarle al mundo lo que hace. Y también necesita un plan. Porque, cuando queremos contar algo, necesitamos un orden lógico a la hora de explicar a qué nos dedicamos. Y no solo eso: tenemos que saber quién lo dice y cuándo lo dice.
Comunicación en tiempos de crisis:
¿Eso qué es?
Todas las empresas son susceptibles de salir en «los papeles». Mal, quiero decir: si salimos bien, es otro cantar. Y de eso hablaré después. Pero centrémonos en una empresa con problemas. Si ha ocurrido algo que llega a los medios de comunicación, ¿cómo nos defendemos de la opinión pública?
Párate a pensar: en esos momentos, es importante actuar rápido pero también con cabeza. Necesitas un plan, ¡maldita sea! Hay que establecer lo que se llama un manual de crisis. Y hay que hacerlo cuando todo va como la seda, para evitar ataques de nervios si ese momento indeseado llega.
Yo puedo ayudarte.
Manual de crisis o cómo impedir que el pánico se apodere de ti
Un manual de crisis es, simplificando mucho, una serie de protocolos que se establecen para que, si llega el caso de tener que enfrentarse a los medios, hacerlo con rigor y para que la imagen de nuestra empresa no quede dañada.
Para ello, imaginamos posibles escenarios de crisis y estipulamos un mecanismo de actuación en el que cada persona sepa qué tiene que hacer.
Si todo el mundo sabe qué tiene que hacer, no habrá líos
En un plan de comunicación en el que exista un manual de crisis, evitaremos que todo se enrede todavía más. Imagina que sucede algo que pone a tu empresa en la picota. Un trabajador se queja del salario, hay una protesta o una huelga, alguien sufre un accidente laboral…
Cada empresa tiene una serie de escenarios potencialmente críticos que hay que analizar. Me siento contigo y averiguamos qué tipo de situaciones podrían dañar la imagen de tu empresa. Después, establecemos quién debe emitir la información, en qué tono y cuándo debe hacerlo.
Si no hay un manual de crisis, nos exponemos a que cualquiera diga cualquier cosa cuando no procede y agudicemos aún más el problema.
¡Tenemos problemas! ¡Corre, escribe un tuit!
¡No! Eso es lo que haría una empresa sin un plan de comunicación y sin un manual de crisis. Si, movidos por el miedo a que nos avasallen, escribimos a toda prisa cualquier excusa o explicación en las redes sociales, nos arriesgamos a que alguien malinterprete nuestras palabras y las tergiverse.
Lo que preveíamos como una solución terminará por agravar el problema. Redes sociales, sí: pero sabiendo de antemano cómo utilizarlas y, sobre todo, quién debe hacerlo. Porque te habrás anticipado al problema.
Pero no todo son problemas: hay que potenciar la imagen de tu empresa
La comunicación corporativa es imprescindible para aprender a definir estrategias
¿Qué quieres contar de tu empresa?
¿En qué eres el número uno?
Y lo más importante, ¿cómo lo vamos a contar?
¿Tienes redes sociales?
¿Has pensado en un blog?
¿Envías boletines informativos a tus clientes y proveedores?
¿Tienes un logotipo que transmita bien tu imagen de marca?
TODO ESO ES COMUNICACIÓN CORPORATIVA
Y ojo a la frecuencia con que informas, porque no podemos pasarnos ni quedarnos cortos. Esto que te he contado en pocas líneas tiene nombres muy rimbombantes: identidad corporativa, estrategias de comunicación, comunicación institucional, comunicación interna y externa…
Al final, lo que yo quiero es que tu empresa sepa cómo difundir su imagen.
La comunicación corporativa ahorra tiempo y complicaciones
Un plan de comunicación viaja en dos direcciones: hacia el exterior y hacia el interior. O dicho de otra manera: hacia nuestros clientes y proveedores (y, potencialmente, los medios de comunicación), y hacia nuestro equipo de trabajo.
Si tienes un plan, lograrás varias cosas:
- Ahorrar tiempo cada vez que haya que emitir una comunicación interna o externa (pues cada uno sabe a quién dirigirse).
- Evitar líos o mensajes repetidos o, lo que es peor, ausencia de información.
- Mejorar los canales de comunicación, tanto dentro de la empresa como desde el exterior (clientes, proveedores y prensa).
- Facilitar las relaciones dentro de la empresa, pues todo el mundo sabe cuál es su tarea en cada momento.
Si tu empresa comienza a crecer, probablemente necesites un plan de comunicación.
Pregúntame y lo hablamos.